Replicamos una nota del periódico Prensa Libre, que fuera realizada hace 3 años atrás a un vecino de esta ciudad, Luis Fourcade. En la nota se recuerdan las décadas del 30,40 y 50, todo en homenaje a la Ciudad que hoy, hace 208 años era fundada oficialmente por el Virrey Sobremonte, en aquel 1805.
El 18 de diciembre se recuerda la fundación oficial de San Fernando, por el virrey Sobremonte. Luis Arturo Fourcade nació un 20 de mayo de 1919. Sin duda es un testigo privilegiado de una parte importante de la vida del distrito. En esta nota, que transcribe una charla informal sobre la comuna, el vecino recuerda los años 30, 40 y 50, la actividad en el Canal, y el quehacer de los comercios de la zona por entonces.
San Fernando 118. La referencia que para cualquier contemporáneo podría ser una dirección es en realidad un número telefónico. Con inusual memoria, el sanfernandino, Luis Arturo Fourcade, da el dato: es el teléfono de la firma, Navegación Isleña, a fines de los años ´30, uno de sus primeros empleos.
El 18 de diciembre se recuerda la fundación oficial de San Fernando de la Buena Vista, en 1805, por parte del virrey Sobremonte, un hecho que investigó y documentó adecuadamente el historiador local, Alberto Gilardoni. Fourcade, con 91 años, dueño de esa memoria y envidiable lucidez, puede contar bastante del distrito.
La armería, cuchillería, casa de tabaco y camping, Fourcade, de su propiedad, es un local tradicional en la zona de Canal San Fernando (Constitución esquina Las Heras), pero no fue su primera actividad, Fourcade navegó el delta por años, muchos con su cuñado Hugo Sturla, y a fines de los ´50 se retiró y puso el negocio.
Su padre era carpintero en el astillero Ortholan, pero él prefirió recorrer los ríos y arroyos del delta. Recuerda que la zona del Canal tenía negocios de armas –Nóbile, en Constitución y Rivadavia tenía su prestigio, recuerda- y armeros que reparaban a nuevo cualquier pieza, seguramente por los requerimientos de la vida cotidiana en el delta.
Fourcade es el mayor de dos hermanos. Él estudió teneduría de libros, el menor se dedicó a la carpintería como el padre. Actualmente vive un poco en su casa de San Fernando y otro poco en una quinta en Gral. Pacheco. Nélida, su mujer, lo acompañó cerca de 48 años.
Lugares
Lo que muchos conocieron como la zapatería El Combate, frente a su local, llevaba ese nombre, pero era un almacén de ramos generales por mayor y por menor, bien surtido. “Los hermanos que eran los dueños se separaron y uno cambió la actividad” relata el vecino memorioso.
A la vuelta, en Avenida del Libertador y Rivadavia estaba la panadería y fábrica de fideos, Girola, y sobre Constitución otra panadería, Las cuatro f, que con los años fue la también conocida El Cañón. “Voy al Cañón. Voy al Combate; así decíamos en esa época” recuerda Fourcade.
Para la charla el vecino trae consigo libros de historia local de Scialpini, Segura Salas, Pablo Pereyra, Gilardoni, pero las cosas van surgiendo del relato sin necesidad de ayuda memoria. El bar y restaurante, La Mariposa, -“con su mostrador grande, típico” describe Fourcade-, en 3 de febrero y Colón, era un lugar de encuentro de la vecindad.
“Por el año ´33 asfaltaron Constitución” acota, y el rostro se le ilumina cuando le viene a la mente la actividad por aquellos años. “La calle Colón era todo negocios. Los trabajadores, de los astilleros iban a la mañana, volvían a almorzar a medio día y luego al trabajo de nuevo. Los pitos de los aserraderos anunciaban la hora de comer”.
“Había fondas en todas las cuadras y más de una por cuadra”. El corralón De Marzi también atraía mucha vecindad. Fourcade manejaba lanchas y vapores que el fin de semana llevaban contingentes de los clubes de barrio -“El Glorias, Artesanos del Dique, Peñarol” enumera- y al regreso bailaban tango en cubierta con orquesta incluida.
El Congreso isleño, el 31 de octubre de 1936, fue el nacimiento del Consejo de Productores del Delta, en el Río Carabelas, en la 2da. sección de islas sanfernandinas, y Fourcade fue un congresal de la partida. También colaboró 54 años en los Bomberos Voluntarios de San Fernando, que vio nacer en un galpón de herrería a metros de su local.
Fourcade es uno de los pioneros de San Fernando, en presente. Tras la charla cuenta que desde enero la tradicional armería, que actualmente gestiona con su hijo menor y su nieto, en su rubro principal se dedicará exclusivamente a los cuchillos, “con el resto seguimos como siempre” comenta y se retira a descansar, que la tarde es larga.
Fuente: Prensa Libre.-
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